Motor de combustión interna
El motor de combustión interna funciona convirtiendo la energía química del combustible en energía cinética, transferida a las ruedas ya sea por transmisión mecánica o eléctrica, para propulsar un vehículo. El combustible necesario para el motor generalmente se almacena en tanques de combustible a bordo del vehículo. Dichos vehículos también requieren aceite para lubricar los sistemas mecánicos, que también se almacenan a bordo. El nivel de ambos recursos se puede controlar mediante indicadores, que normalmente se encuentran en la cabina del vehículo. Ambos recursos antes mencionados deben ser recargados periódicamente.
Para arrancar un motor, comúnmente hay un control etiquetado como "Arrancador", que activa el motor de arranque. Este es un pequeño motor eléctrico que acciona el motor hasta que comienza a quemar combustible y funcionar por sí solo. El disyuntor “Starter” debe estar encendido para que el motor de arranque pueda funcionar.
Los motores tienen un rango de velocidades de rotación en las que están diseñados para funcionar. Las RPM mínimas son la velocidad de ralentí a la que el motor funciona por sí solo. Ir más lento provoca una tasa de combustión insuficiente y el motor se apaga. Las RPM máximas están determinadas por la línea roja en el indicador de RPM y se pueden alcanzar acelerando demasiado o con una operación defectuosa de la transmisión. Ir más rápido resulta en daños al motor y puede ser catastrófico.
Para detener un motor, generalmente hay un control etiquetado como "Corte de combustible". Esto corta el suministro de combustible al motor y hace que deje de funcionar.
Dado que los vehículos con motores de combustión interna llevan combustible a bordo, pueden explotar si se exponen al fuego. También emiten partículas de sustancias nocivas a la atmósfera, contribuyendo al daño ambiental por el mero funcionamiento.
El consumo de combustible en un motor diesel varía según la carga. Por ejemplo, incluso si el conductor mantuviera el control del acelerador en la misma posición, subir una pendiente consumiría mucho más combustible que bajar una pendiente.
See also: Breakers, Mechanical Powertrain Damage, Throttle, Environmental Impact Fee